Disponer de un fin de semana para un viaje puede que parezca a simple vista poco tiempo, pero puede ser más que suficiente si sabes sacar el máximo provecho a esas 48 horas.
En el verano más caro de tu vida, viajar a cualquier parte supone un gran desembolso, por lo que es posible que este año tengas que conformarte con hacer alguna que otra escapada y dejar los grandes viajes para otro momento.
Pese a que ya hayamos cruzado el ecuador de este verano, aún quedan muchos fines de semana por delante que te permitirán disfrutar de una escapada a ese lugar al que siempre has querido ir.
Business Insider España ha hecho una selección de 9 de los mejores viajes de fin de semana que puedes hacer por España si no tienes tiempo de irte de vacaciones este verano.
Ribadesella (Asturias)
Ribadesella es conocida por el descenso del río Sella, fiesta asturiana declarada de Interés Turístico Internacional que se celebra cada año a principios de agosto —este año el día 6, concretamente—.
Flanqueado por el Cantábrico, el río Sella y los Picos de Europa, muchas son sus actividades y deportes de aventura que pueden practicarse en sus inmediaciones senderismo, piragüismo, espeleología o escalada entre otras.
Ribadesella es también un enclave importante por su patrimonio paleontológico, destacando la Cueva de Tito Bustillo, declarada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad por la importancia del arte rupestre que se conserva en su interior. ¡Un plan insuperable de fin de semana con los más pequeños!
Elciego (Álava)
El casco histórico de Elciego está poblado de casas palacios con sus fachadas decoradas por escudos nobiliarios. La plaza mayor es el corazón del centro histórico donde destacan el ayuntamiento y la iglesia de San Andrés (ambas edificaciones se remontan al siglo XVIII).
Ubicado en la Rioja Alavesa, no se puede hablar de Elciego sin hacerlo de bodegas y viñedos. Visita obligada las Bodegas Marques de Riscal en las que se encuentra el Hotel Marqués de Riscal, obra del Nobel de Arquitectura Frank O. Gehry y un ejemplo impresionante de vanguardismo. ¿A quién no le apetece una escapada enológica?
Cabo de Palos (Murcia)
Sin duda, la joya de la corona de Cabo de Palos es su icónico faro, iluminado por primera vez en 1865, aunque no se quedan atrás sus idílicas calas y el valor de sus fondos marinos, declarados en 2015 como mejor destino europeo para el buceo.
Ligado al municipio de Cartagena, este pueblo pesquero también destaca por su pequeño puerto donde ver las numerosas embarcaciones de pescadores y buceadores que reposan allí.
Durante la tarde y la noche no dejes de acudir a la plaza de la Virgen del Mar, rodeada de casitas blancas y adornada con luces y farolillos es uno de los espacios más animados del pueblo, que se llena de actividad en sus terrazas donde pararse a tomar algo. No hay mejor plan para un fin de semana.
Estella – Lizarra (Navarra)
Entre la Montaña y la Ribera Alta de Navarra se encuentra Estella-Lizarra, ciudad monumental de origen jacobeo, estrechamente vinculada al Camino de Santiago.
Con claro sabor medieval, el valor monumental que atesora esta pequeña villa es llamativo, contando entre su patrimonio con hasta 3 castillos que se suman a sus casas señoriales y palacios, de entre los que destaca el Palacio de los Reyes de Navarra, único edificio románico civil de Navarra.
Sobresale también su judería y sus numerosas edificaciones religiosas que hacen de Estella uno de los enclaves más prominentes del románico en Navarra. Sin duda, un lugar perfecto para conocer en un par de días un poco mejor nuestra historia.
San Millán de la Cogolla (La Rioja)
San Millán de la Cogolla es designado como «cuna de la lengua», ya que este valle vio nacer las primeras frases del castellano —conocidas como Glosas Emilianenses— que siglos después iría evolucionando hasta generar la lengua que hoy en día se habla en buena parte del mundo.
Además de este histórico lugar, no te pierdas las numerosas rutas y senderos de este pueblo ideales para los amantes de las actividades al aire libre. ¡Deporte y cultura todo en uno!
Vila Joiosa (Alicante)
Villajoyosa, también conocida como Vila Joiosa en valenciano o simplemente La Vila, es un pintoresco pueblo alicantino de tradición pesquera y cuyo origen se remonta a los romanos.
A media hora de Alicante, en la comarca de la Marina Baixa, lo más conocido de este pueblo son sus llamativas fachadas pintadas en vivos colores dibujando una arquitectura muy acorde con su nombre, que en valenciano quiere decir ciudad alegre.
Villajoyosa ofrece la oportunidad de disfrutar del mar y el sol en un ambiente muy tranquilo y sosegado. ¡No hay mejor plan cuando se necesita escapar del bullicio de la ciudad!
Albarracín (Teruel)
El pueblo de Albarracín impresiona incluso antes de llegar a él, ya que se engarza sobre la propia roca, en lo alto de un peñasco coronado por su castillo de origen árabe transformado tras la reconquista y arropado por las antiguas murallas.
Sus casas rojizas con balcones en forja y madera se reparten por las angostas y empinadas calles que recorren su caótico trazado medieval.
Si estás buscando un pueblo campestre y pintoresco al que irte de escapada este verano, este es tu sitio.
Cazorla (Jaén)
A las faldas de la Peña de los Halcones, Cazorla se asienta con la sierra a sus espalda mirando a la campiña jienense y su horizonte plagado de olivos. Sus casitas blancas recorren la ladera de la montaña, presidida por el Castillo de la Yedra en la parte alta.
Entre las muchas rutas que posibilita este entorno se encuentra la que incluye el mirador de Félix Rodriguez de la Fuente que recoge algunos de los paisajes en los que el naturalista filmó para El Hombre y la Tierra al quebrantahuesos o las berreas de los ciervos.
Se trata de un destino perfecto para una escapada rural, en un entorno donde el mayor protagonista es el propio paraje natural.
Almagro (Ciudad Real)
El Corral de Comedias, que conserva aún hoy su estructura original del siglo XVII, es sin duda el emblema de Almagro. La localidad se ha colocado en el mapa internacional gracias a su Festival Internacional de Teatro.
Con la llegada de las familias adineradas durante los siglos XVI y XVII, se generó un entramado urbano repleto de casas solariegas hidalgas y palacetes que dibujan el conocido como Barrio Noble.
Por su cultura y su belleza, Almagro no podía faltar en la lista de destinos ideales para una escapada de fin de semana.
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