Los alojamientos esperan el mismo número de clientes que en 2009

Previsión de ocupación para los meses estivales.

Hosteleros y propietarios de viviendas rurales son conscientes del delicado momento que atraviesa el país y, por eso, buscan mantener las cifras de ocupación registradas el pasado año. El mejor mes del verano es agosto, pero entre sus pretensiones no está llenar todas las camas, sino que se conforman con acercarse a esa ocupación máxima. 

De todas formas, a fecha de hoy todo son conjeturas puesto que, como ya es habitual en los últimos años, las reservas se producen con muy poca antelación y en algunos casos las plazas se llenan con turistas que llegan sin haber reservado.

En lo que a los hoteles se refiere, la ocupación prevista para julio se sitúa entre el 50 y el 60%, mientras que en agosto la media provincial podría rondar el 80%. De todas formas, el presidente de la Asociación Teruel Empresarios Turísticos (TET), Fernando Cánovas, apunta que tradicionalmente «julio es un mes flojo que cada año va a menos», pero se compensa con un septiembre en el que cada vez hay más clientes.

Los propietarios de casas de turismo rural esperan que el verano sea «mejor de lo que se pensaba en un principio», según dice el presidente de la Federación Aragonesa de Turismo Rural (Faratur) y de la Asociación Española de Turismo Rural (Asetur) Jesús Marco. La previsión es rondar en julio el 80% de ocupación y en agosto aspiran a «tener mejores cifras», aunque reconoce que será difícil colgar el cartel de completo en sus alojamientos.

Estos números no se corresponden con las reservas reales que hay para esas fechas, que son mínimas debido a que los clientes esperan a última hora para seleccionar alojamiento, según concretan desde el sector.

Fuente: Diario de Teruel

Fecha: 09/07/2010